Soy un desconocido para usted, pero no importa ; tengo que decirle una cosa. Acabo de llegar a casa desde México y me he enterado del caso. Por supuesto que usted no sabe quien hizo el comentario, pero yo si lo sé, y soy la única persona con vida que lo sabe. Fué Goodson. Le conocí muy bien, hace muchos años. Iba de paso por la ciudad aquella misma noche y fui su invitado hasta que llegó el tren de media noche. Acerté a escucharle hacer ese comentario al fotastero que se hallaba en la oscuridad; fue en el Hale Alley. Él y yo hablamos de ello durante el resto del camino y mientras fumábamos en su casa. Habló de muchos de sus conciudadanos en el transcurso de la charla, de la mayoría de un modo muy poco halagador, pero de dos o tres si habló favorablemente; entre estos se encontraba usted. Digo favorablemente>> nada más. Recuerdo que decía que en realidad no había ninguna persona en la ciudad que APRECIASE, pero que usted- CREO que se refería a usted, estoy casi seguro- le había hecho un gran favor en cierta ocasión , tal vez sin conocimiento de su transcendental importancia , y que al morir, así hubiera dispuesto de ella , le habría dejado a usted una fortuna y una maldición a cada uno de sus conciudadanos. Ahora bien , si es usted quien ,le hizo el favor, usted es su legítimo heredero y tiene derecho al saco de oro. Sé que puedo confiar en su honor y honradez, pues en un ciudadano de Hadleybung estas virtudes son una herencia infalible, de modo que voy a revelarle el comentario, convencido por completo que si es usted no es el hombre indicado buscará y encontrará al hombre pertinente y procurará que quede pagada la deuda de grastituddel pobre Goodson.
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